De obligada lectura antes de proseguir el viaje

Los textos que encontrarás aquí son retazos desvaídos de la obra de Unois, una mente enferma. Muchos fueron extraídos bit a bit de un disco duro arrasado por los virus, que le fue legado al guardián del "Argos".

Inconexos, incompletos, sin sentido, pero con toda la fuerza de la inconsciencia.

No nos hacemos responsables de las posibles secuelas tras la lectura de estos "Sueños del Argonauta". A partir de aquí, tú decides. Es lo que tiene el libre albedrío.

The Wombats

Descubrí a The Wombats en una de las sesiones golfas de los amigos de “Lo que yo te diga”. Son un trío radicado en Liverpool que nació al amparo de la escuela de arte que fundó el exbeatle Paul McCartney. En su primer álbum, “A Guide To Love, Loss And Desesperation” nos muestran un rock eléctrico y ecléctico, plagado de guitarras explosivas, bajos potentes y percusión sencilla. Muchos dirán que su música no es más que un intento de banalizar el rock indie, pero The Wombats han venido a abrir una ventana de aire fresco en el enrarecido ambiente del rock moderno, ese al que sólo se puede acceder si la canción es compatible con las pista de baile.

Entre sus canciones, una ecléctica muestra de su talento, podemos y debemos destacar “Moving To New York”, “Let’s Dance To Joy Division” y “Kill The Director” para los amantes de guitarras potentes y ritmos poderosos, pero también podemos encontrar canciones llenas de sentimiento ejercitadas mediante la conjunción de sus voces cantadas casi a capela, como “Tales of Girls, Boys & Marsupilas” ó “Little Miss Pipedream”, una delicia de canción y, para nosotros, la mejor del disco.

Si eres de los que huye de estereotipos musicales, pero te gustan los ritmos del indie-rock de baile, no lo dudes, The Wombats no te decepcionarán…


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